En el Real Decreto 1021/2015, de 13 de noviembre publicado en el BOE de 17 de noviembre.
La banca deberá identificar la residencia fiscal de los titulares o de
quien ostente el control de todas las cuentas financieras. La Agencia
Tributaria tendrá información financiera y de forma
automática sobre cuentas situadas en más de medio centenar de países y
jurisdicciones, entre ellos Luxemburgo, lo que supondrá un impulso a la
lucha contra el fraude, especialmente el más sofisticado.